miércoles, 11 de julio de 2012

Challenge Roth, vuelve la ilusión. Vuelvo a competir

Bueno, pues ya estoy de vuelta. He disfrutado mucho del viaje y la compañia (Valerini y Use, gracias por aguantarme) y después de 3 dias de haber hecho el Ironman, puedo decir me he reconciliado con la prueba. 

Cuando hablo de reconciliar me refiero a poder integrarla en mi vida sin que suponga un sobresalto o un cambio demasiado brusco en mi vida cotididana.
 Me he reconciliado por muchos motivos; primero me ha servido para olvidarme definitivamente de la visión competitiva que quiera o no siempre me quedaba cuando me apunto a un triatlon; segundo, la distancia Ironman la veo realizable no necesitando 6 meses ó 3 meses a mayor intensidad de dedicación casi exclusiva. Tercero, he visto que puedo disfrutar realizando estas pruebas y haciéndolo dignamente sin obsesionarme con marcas o alcanzar un determinado nivel, bastandome sólo la motivación de poder hacerlo.

Me ha venido muy bien, aunque parezca un contrasentido haber pecado de exceso de competitividad haciendo una bici muy buena recuperando sensaciones que hace años no tenía. Sin duda estos 2 meses de entreno constante me han ayudado a coger el nivel de bici que sabía que podía tener, pero claro nada es gratis y en 2 meses es verdad que he mejorado mucho en bici hasta casi el nivel que tenía en mis buenos tiempos, pero a costa de estancarme en la carrera a pie.

El resumen es tan corto como aplastante, para hacer un Ironman con la competitividad con que he afrontado éste, tenía que si ó si haber dedicado mas tiempo, mas meses; y por las sensaciones que he tenido en la maraton creo que 1 mes más habría bastado, para una vez asentado el nivel de bici encarar las transiciones largas con garantías, cogiendo fuerza y resistencia de cara a la maratón.

Pero eso es a nivel competitivo, que si cumples con los entrenos y le quieres dedicar el tiempo y esfuerzo que requiere esta muy bien. A nivel deportivo, estoy muy contento porque yo disfruto mucho muchísimo planteándome estos retos de hacer ironman, maratón, etc... y a este nivel me veo muchos años pudiendo disfrutar de este mundo sin renunciar a mi vida normal, tan sólo hay que ser un poco más organizado y no dejarlo todo para el final.

Dicho esto, y como el challenge de Roth me ha dejado a medias en el buen sentido, es decir con ganas de seguir entrenando y seguir mejorando, he decidido apuntarme al challenge de Maresme Barcelona el 30 de septiembre. 

Se juntan muchos motivos pero el principal es que me veo manteniendo unos entrenos razonables durante el verano. Simplemente no necesito dedicar más horas de lo habitual en esta época para mantener el nivel de bici. Y aprovechar eso  si, los  meses de julio y agosto para mejorar el nivel de carrera que no me exige tanto tiempo y es compatible con disfrutar del verano. 

En el mes de septiembre, tampoco necesito volverme loco volviendo a meter un poco de ritmo en bici con semanas de más kilometraje y haciendo esta vez sí, un par de transiciones largas espero ya con el fondo de carrera que un Ironman requiere.

De todo se aprende y de un Ironman se puede aprender y mucho. Y a mi  creo que me ha servido para seguir aprendiendo.

Atope.